viernes, 7 de noviembre de 2008

Acupuntura




Acupuntura



Una de las ramas de la Medicina Tradicional China junto con la Moxibustión, la Fitoterapia, entre otras, es la Acupuntura. Es el arte y la ciencia que trata las enfermedades mediante la utilización de agujas en determinados puntos del cuerpo que se hallan distribuidos a lo largo de líneas de energía llamadas meridianos.
Debemos recordar que la Medicina Tradicional China se sustenta en una Filosofía de la Energía, esto es el Taoísmo, donde encontramos que “el universo es la oscilación de dos actividades yin y yang, y sus vicisitudes”.
El Tao significa que nada es yin absoluto, ni yang absoluto, por eso cada parte del símbolo lleva un pequeño círculo que representa una porción de la actividad opuesta (es decir que en la zona yang ya se encuentra mínimamente una porción de yin en germen, en potencia que se desarrollará hasta alcanzar su máxima expresión y convertir toda la zona en yin con un mínimo yang que evolucionará continuando el ciclo).
En resumen: hay una energía primaria, original, fundamental, llamada Ki que penetra y conforma todas las cosas; esta energía existe en dos formas idénticas pero opuestas, denominadas yang y yin que simbolizan las dos fases alternas y complementarias del cosmos y la naturaleza.
Las fuerzas yang y yin se corporizan en la materia a través de los cinco elementos:
la madera el fuego la tierra el metal el agua
Cada uno de estos elementos o movimientos, tiene correspondencia con una emoción, una estación del año, un órgano, un color, un sabor, etc.
De modo que los cinco elementos nos brindan las herramientas para elaborar un diagnóstico, un pronóstico y un tratamiento.
Frente a una patología dada la acupuntura en general se encara de dos maneras, al igual que la homeopatía.
Puede actuar directamente sobre la misma, esto es, una “acupuntura sintomática” u “organicista”, una acupuntura que trabaja sobre un síntoma, la “expresión” de un cuerpo, lo cual no permite que la verdadera etiología no sea descubierta ni tratada. Esto, a su vez, origina que la enfermedad aparezca nuevamente con otro rostro. Por lo tanto, se trata en principio de una medicina de compostura y urgencia, y ya que paliar no significa curar se entiende que una medicina de esta naturaleza sólo es opción o es válida para los cuadros agudos, infecciosos o traumatismos. También existe otro tipo de acupuntura más elaborado, sutil y complejo, una acupuntura inspirada en las causas y no en los efectos; en la energía del paciente, en lo que Hahnemann postulaba “lo digno de ser curado”.



1 comentario:

Pablo dijo...

Sensei, le agradezco estos conocimientos que me ha brindado, le pediría por favor si puede ilustrarnos con un cursito mínimo de Medicina China...